la familia Raluy

Nuestra Historia

1911

el comienzo

Los inicios (1911–1939)

Francisco Raluy, originario de Fonz (Aragón), era un joven inmigrante que decidió marcharse con su familia a Francia en busca de un futuro más seguro. Consiguió trabajo en la ciudad de Carcasona, donde, el 11 de febrero de 1911, nació su hijo Luis Raluy Iglesias. Con el inicio de la Primera Guerra Mundial, Francisco optó por regresar a España.

Luis, desde muy joven, se dedicó a la gimnasia, solía frecuentar las playas de la Barceloneta para entrenar acrobacias y barras fijas. La desembocadura del Besòs y la playa del Camp de la Bota eran sus lugares de entreno, por allá en los años 30 del pasado siglo. En esa época era conocido como “El Tigre de Sant Adrià”. 

Casualmente el barrista Juanito Siles pasó en busca de un tercer elemento para recomponer su trío después de la baja de un compañero. De ese modo Luis Raluy volvió a pisar las huellas del padre, pero con resultados impresionantes. Se integró en los célebres números de barras de los Oliveras y los Keistone, paseándose por las pistas europeas más prestigiosas de entreguerras.

Cuando estalla el segundo conflicto mundial, el lugar mas seguro vuelve a ser su hogar en Sant Adrià del Besos, así vuelve a Cataluña.

En la barcelonesa calle del Conde de Asalto (hoy Carrer Nou de la Rambla), se encuentra, hasta hoy en día, el London Bar. En aquellos años el local es la sede y el refugio de los artistas españoles. Allí, entre sus paredes adornadas de fotos en blanco y negro y el humo de los cigarrillos se hablaba de historias y técnicas circenses, retos y lecciones… sueños.

El London, cantera de artistas, se convirtió en una verdadera agencia, Luis Raluy era un asiduo frecuentador del local y muy rápidamente encuentra contratos en los mejores circos españoles de aquellos años: Feijóo, Royal, Amoros Silvestrini…

Durante aquellas giras conoce a su esposa, la Igualadina Marina Tomàs Jorba.

Entre gira y gira, espectáculo y espectáculo, los dos ven nacer a sus hijos en Sant Adriá: Luis, Carlos, Eduardo y Francis.

Luis padre es un hombre trabajador, ambicioso y creativo. El mismo construye su cañón de aire comprimido y se convierte en uno de los primeros Hombre Bala europeos.

A partir del final de la segunda guerra mundial, este numero le proyecta a la fama de los mejores circos europeos: Cirque d´Hiver de Paris, Cirque Bouglione, Chipperfields Circus, Cirque Amar. Entre tanto Carlos Luis y Eduardo se convierten en jóvenes acróbatas de talento, tomando el relevo del padre en las Barras Fijas.

En 1960 la familia Raluy parte, gracias a un contrato con el Circo Brasil, en una gira mundial que les llevará desde Madagascar hasta la isla de la Reunión siguiendo en Dar es Salan, Lago Victoria, Kampala, Nairobi, Kilimanjaro, Mombasa, Isla Kaulin y Hong Kong.

De regreso a Barcelona la familia Raluy es victima las inundaciones del 1963, que se lleva todas sus propiedades y los ahorros de años de trabajo.

Pero Luis Raluy no se deja hundir por los acontecimiento. Los números de barras fijas, de hombre bala y su ultima invención: el Triple Salto Mortal en Automóvil, vuelven a entusiasmar al público que llena el graderío de los circos Moira Orfei (Italia, años sesenta), Toni Boltini (Holanda, 1968-69) y Amar (Francia, 1970-71).

1972

empresarios

Con los ahorros y tras muchos sacrificios, los Raluy ven como el viento acaricia su primera carpa bajo el cielo portugués. La familia compra el material del modesto Circo París -nombre del que no se podían desprender por absurdas normas de registro- con lo que tenemos unos carteles que proclaman sobre los muros:

Circo de París (en letras muy pequeñas) presenta Circo Alabama, el primer nombre de las producciones de Carlos. En un Portugal que empieza a oler a “claveles revolucionarios” y a comunismo, Carlos saca beneficios de estos aires y el circo se transforma en Circo Moscova. Estalla la revolución; asustado por las consecuencias que podía traer, Carlos y sus hermanos pasan su material -camuflado como mobiliario en transportes de mudanzas- a Badajoz. De este modo la capital extremeña fue testigo de la transformación de Circo de Moscova en Circo de Moscú.

En 1972 los Raluy se encuentran actuando en el Blackpool Tower Circus de la homónima ciudad en el sur de Inglaterra. Las decisiones y acontecimientos de esta temporada marcaran los inicios del Circo Raluy.

Carlos Raluy, el segundo hijo de Luis, acaba de casarse con Rosemarie Chy, artista de origen china naturalizada en Alemania. Carlos y Rosemarie esperan una niña, Carlos se da cuenta que la familia se está haciendo demasiado grande para poder seguir viviendo con el sueldo de artista. Su hermano mayor también tiene esposa y hija…

Durante el verano de 1972 Carlos reúne al padre y a todos sus hermanos para proponer a la familia su nuevo proyecto: dejar de actuar para otras empresas y abrir su proprio circo.

Los hermanos vacilan, pero Luis Raluy tiene total confianza en las ambiciones de Carlos y invita a todos a seguirle en sus ideas.

El 26 de septiembre, poco meses antes de que se levante la primera carpa de los Raluy, nace Rosa, hija de Carlos y futura directora del Teatro Circo Rosa Raluy y de Circo Histórico Raluy.

1979

la idea

En aquellos días, época de “transición”, empieza a ser común en los circos españoles presentar personajes televisivos. Los Payasos de la Tele triunfan entre los niños y el mundo del circo, en España, comienza una lenta decaída.

Carlos había heredado de su padre un espíritu nostálgico y pasión por las cosas de antes, las cosas bien hechas. A final de los 70” empieza a transmitir a sus hermanos la idea de trasladar a los negocios esta pasión, creando un circo que represente la época en la cual su padre triunfaba en los grandes circos europeos.

Epoca en la cual el arte circense se encontraba en su apogeo y los grandes artistas se convertían en verdaderas estrella.
Hacer realidad esta idea parece imposible, pues harían falta muchos recursos! Recuerda con nostalgia la épica gira de su familia en el Circo Brasil por tierras africanas y asiáticas.

También recuerda que el Circo Brasil era el primero en visitar la mayoría de aquellos países… en este momento le surge una pregunta: a algún otro empresario de circo se le habrá ocurrido volver?

1987

Circo Raluy

En 1984, Carlos y Luis empiezan una de las múltiples “tornees” por el Caribe y el Océano Indico: Isla Reunion, Guayana, María Galante, Sant Barthelemy, Guadaloupe, Martinica, Santa Lucía, Barbados, Puerto Rico y Costa Rica. La familia Raluy es muy conocida entre el publico de los trópicos por sus espectáculos, pues a menudo son el único circo que visita tales archipiélagos.

No nos debe sorprender, pues, que en ciertas islas la afluencia de público supere con facilidad el cien por cien de la población. Estas giras regulares continuan durante 10 años, en 1987 también visitan Alemania con la intención de experimentar el “Circo a la Antigua”. En esta ocasión aparece por primera vez la denominación Circo Raluy.

A finales de 1995, el Raluy regresa a España y da un paso adelante en su concepción estética: la carpa recupera la forma redonda, dejando atrás las cúpulas italianas; el interior se reviste de terciopelos rojos y los palcos, de estilo imperial, se adornan con tallas de madera.

El Raluy se consolida como un circo intimista, cálido y lleno de personalidad, hasta el punto que la crítica comienza a definirlo como un “circo de cámara”.

El espectáculo es esencialmente familiar y la tercera generación empieza a hacerse presente en la pista: Rosa y sus primas Luisa y Kerry demuestran ser artistas excepcionales. También se incorporan sus respectivas parejas: Jerzy Swider, esposo de Luisa, que comienza como mozo de pista y pronto se convierte en un artista polivalente; y William Giribaldi, joven malabarista y acróbata, que entra como contratado y pronto se convierte en una pieza clave de la nueva gestión artística y administrativa.

Carpa del Circo Raluy en 1995
“Circo Raluy es la suma de todo lo que me gusta del fantástico mundo de las artes escénicas

1996

inicio de una leyenda

A finales del 1996 el Circo Museo Raluy recibe el Premio Nacional de Circo del Ministerio de Cultura que no sólo elogió y reconoció la calidad artística de sus espectáculos, sino también su esfuerzo por la conservación del patrimonio circense

Triunfa en la crítica madrileña, participa como espectáculo invitado en el prestigioso Festival de Teatro Clásico de Almagro, realiza una exitosa gira por Catalunya y actúa en el corazón de Málaga dentro del marco del Festival Internacional de Teatro.

En 1997 también es un años clave para la trayectoria del Raluy; en diciembre de aquel año, por primera vez, los carromatos históricos y la bonita carpa de Carlos y familia se instalan por primera vez en el Port Vell de Barcelona para la campaña Navideña. El éxito es sensacional! Entre funciones y aplausos también llega otra bonita sorpresa: nace Kimberley Giribaldi Raluy ( primera hija de Rosay William)… ha llegado la cuarta generación de la familia!

En los años que siguen se multiplican los éxitos y los acontecimientos que convertirán el Circo Raluy en el referente mundial que es hoy en día y, sobre todo, en el circo mas representativo de Cataluña.

El 27 de octubre de 1999 nace en esta ciudad Jillian Giribaldi Raluy, segunda hija de Rosa… el futuro del Circo Raluy ya esta asegurado con las Hermanas Raluy!

2016

la separación

Circo Raluy en Reus 2025. Detalle de la entrada
Circo en Platja d´Aro. Exterior de la carpa del Circo Raluy en el Port Vell de Barcelona.

En octubre de 1999, durante la primera participación del Circo Raluy en las Ferias de Girona, nace Jillian. Y en esa misma ocasión también germina una nueva aventura. Carlos, siempre inquieto y fiel a su espíritu nómada, entra en contacto con su primo Sergio Rodríguez Raluy, tenor residente en Buenos Aires. Y una vez más, como solía decir él mismo, se hace “lo más difícil todavía”: el Circo Museo Raluy emprende gira por tierras argentinas.

La acogida del público sudamericano es extraordinaria. En Mar del Plata, en enero del año 2000, el circo recibe la Estrella de Mar, uno de los premios más prestigiosos del país, así como el Premio Nacional Faro de Oro. El éxito se extiende a otras ciudades, y la crítica argentina celebra la llegada de un circo europeo de auténtica categoría artística. Paralelamente, en España, la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) concede al Circo Raluy el Premio Max, reafirmando su valor cultural.

De regreso a Cataluña, la compañía retoma las giras nacionales, pero ahora lo hace con otra mirada: el proyecto de Carlos no es solo artístico —es patrimonial. El Circo Museo Raluy comienza a ser percibido como una institución cultural singular, capaz de preservar y transmitir la esencia del circo clásico europeo en el siglo XXI. En el año 2003, se inicia una nueva gira por Europa del norte: Luxemburgo, Bélgica y Noruega. En Oslo, toda la compañía es recibida por el propio alcalde en una sala que habitualmente acoge la entrega de los Premios Nobel. Un símbolo poderoso: la alta cultura abrazando al circo como una forma de arte igual de digna y universal.

A partir de 2004, las giras del Circo Museo Raluy adquieren una nueva regularidad. Cada año, entre junio y septiembre, la compañía visita la isla de Reunión (colonia francesa en el océano Índico), donde ya es conocida y querida por el público local. El resto del año, el circo gira por tierras catalanas, reforzando así un vínculo emocional con el territorio y consolidando su arraigo en Cataluña. Las campañas navideñas en Barcelona, iniciadas con gran éxito a finales de los 90 se convierten en una cita esperada por el público y una marca de identidad.

En 2006, Carlos y Lluís Raluy reciben la Creu de Sant Jordi, el máximo galardón que otorga el gobierno catalán a ciudadanos e instituciones destacadas. Un circo ambulante, familiar y fiel a su estética clásica recibía el mismo reconocimiento que artistas, científicos e intelectuales del país.

Durante esta etapa, el Circo Museo Raluy vive una de sus fases más sólidas y reconocidas. Las giras por Cataluña y Aragón se convierten en habituales y muy esperadas. Ferias, fiestas mayores y festivales incluyen al Raluy como un elemento de prestigio cultural y de atracción popular.

Durante estos años, también se produce un cambio discreto pero significativo dentro de la dirección de la empresa: Lluís Raluy, hermano mayor de Carlos y responsable de la administración durante más de tres décadas, va reduciendo progresivamente su actividad por motivos de salud. Su contribución había sido fundamental: hombre de números, metódico, riguroso, aportaba el equilibrio perfecto al espíritu soñador y expansivo de Carlos. Juntos habían construido un proyecto único, donde la pasión artística y la gestión ordenada iban de la mano. Hacia 2014, Lluís cede totalmente la responsabilidad empresarial y artística, pero continúa vinculado emocionalmente al proyecto.2016 – Una separación y un nuevo camino: el Circo Histórico Raluy

Con la retirada progresiva de Lluís Raluy de la dirección activa, el proyecto familiar entra en una etapa de transición natural.

Después de más de cuatro décadas de trayectoria conjunta, con grandes éxitos y momentos intensos, las diferencias de criterio y visión de futuro entre las distintas ramas de la familia se hacen más visibles. En el año 2016, las hermanas Luisa y Kerry Raluy, hijas de Lluís, deciden emprender un proyecto propio bajo una nueva denominación: Circo Raluy Legacy. Esta decisión, aunque no compartida por todos, responde al deseo de dar forma a sus propios caminos artísticos y empresariales. Ante este nuevo escenario, Carlos Raluy, fiel al espíritu que había guiado la creación del circo original, opta por reconfigurar el proyecto familiar bajo una nueva identidad que resalte su esencia y recorrido histórico: Así nace el Circo Histórico Raluy, como continuación directa del circo fundado en 1972. Ese nombre no es solo un título legal, sino una afirmación de compromiso con la historia, la estética y los valores que han definido el proyecto desde sus inicios. Es también una forma de poner en valor el patrimonio acumulado a lo largo de más de cuarenta años de esfuerzo y dedicación.

2019

el legado

En 2019 Rosa Raluy, lleva de gira por Cataluña un nuevo espectáculo bajo la nueva carpa de Teatro Circo Rosa Raluy. El espectáculo denominado Vekante (palabra del idioma Esperanto) se revela totalmente innovador dentro del marco de las producciones de los Raluy, consiguiendo aportar pinceladas de circo contemporáneo a la estética clásica. Premiado con el Premio Zirkolika al mejor espectáculo de circo 2019 recibe todo el favor de la critica durante su visita a la Feria de Girona.

El 23 de noviembre de 2019, justo a pocos días de iniciar la nueva campaña navideña en Barcelona, Carlos Raluy fallece de forma repentina en la ciudad condal. Su muerte deja un vacío inmenso, pero su sueño, su obra y su estética siguen vivos en cada detalle del proyecto que construyó. La familia, el público y el mundo del circo reconocen lo que Carlos ha significado: un creador con visión, un defensor del circo como patrimonio cultural y un artista que luchó por preservar el alma de su oficio. El Circo Histórico Raluy, ahora bajo la dirección de Rosa Raluy, no solo continúa su camino: honra su legado con coherencia, respeto y pasión.

Rosa Raluy, acompañada por su marido William Giribaldi y sus hijas Kimberley y Jillian, esta ahora al frente de la empresa, asegurando la continuidad del circo mas representativo de Cataluña y de España: el histórico “Circo Raluy”

Nombre de Kimberley y Jillian Raluy. Las Hermanas Raluy.
Kimberley y Jillian Giribaldi Raluy. Las Hermanas Raluy en una actuación.

Kimberley y Jillian Giribaldi Raluy

Mas Raluy

¡No todos saben que la pista es un enorme contenedor de valores positivos que vale la pena descubrir!

Taller en el Circo Raluy: Descubrir valores

Gira

Del 2 October al 

12 October

Olot

Del 5 December al 

1 March

Barcelona